Pixabay" style="" />Este estudio muestra una mayor exposición a partículas finas estaba asociada a una menor atención ejecutiva, tanto en niños como en niñas. / PixabayExisten cada vez más evidencias de que estar expuesto a la contaminación atmosférica en las primeras etapas de la vida está asociado con efectos negativos sobre las capacidades cognitivas. Un nuevo estudio liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), centro impulsado por ”la Caixa”, ha añadido nuevos datos al respecto: la exposición a las partículas finas (PM2,5) durante la gestación y los primeros años de vida está asociada con una reducción en habilidades cognitivas fundamentales, como la memoria de trabajo y la atención ejecutiva.
Participantes del proyecto Breathe realizando tests por ordenador. / ISGlobalAsimismo, se observó que una mayor exposición a partículas finas estaba asociada a una menor atención ejecutiva, tanto en niños como en niñas. La atención ejecutiva es una de las tres redes que conforman la capacidad de atención.